jueves, 25 de abril de 2013

El Sonido

Hace mucho tiempo leí una noticia sobre un estudio de que el tipo de música que escuchas influye en el metabolismo de tu cuerpo, en tu estado anímico y en tu salud. Y esto último me hace mucho sentido ahora que empiezo a estudiar Terapia Ocupacional, el otro día haciendo un trabajo de los antecedentes de la T.O. para la profesora Silvia (Silvy-love) leí sobre como antiguas civilizaciones usaban la música como medio terapéutico para curar enfermedades, calmar conciencias, etc.

Es interesante como simples frecuencias de sonido y de diferentes timbres, mezcladas entre sí de manera armónica pueden influir tanto en el bienestar del individuo. De hecho abundan mitos de canciones que si las escuchas te inducen al suicidio o que contienen mensajes subliminales que te llevaran a cometer actos no voluntarios. Pero más allá de eso la música te transporta a lugares recónditos de tu mente, experiencias vividas, imaginaciones…

En fin, hablo sobre esto porque en clase de Estrategias vivimos una experiencia excepcional con la música en “sonido creativo”. Nos pidieron llevar instrumentos musicales y todos y cada uno de mis compañeros llevaron una variedad de instrumentos y haciendo la previa de la clase, más de alguno empezó a tocar su instrumento (uno mas virtuosos que otros). Mi instrumento fue la guitarra (Tiara), si bien es cierto no toco tan bien mas todavía me defiendo y me gusta tocar. Ya en clases se nos pidió mantenernos callados y dejar nuestros instrumentos en el centro de la sala, para luego elegir un instrumento que no fuera el que trajiste. El instrumento que “elegí” (lo pongo entre comillas porque los instrumentos que quise elegir alguien los agarró antes) fue la flauta dulce y fue como reencontrarme con una vieja amiga, la cual vio mis primeros pasos en la música y que me acompañó por muchos años, a todo esto, siempre me acuerdo que mi profe de música me decía (en el tiempo que tuve clases de música en el liceo) que ese tipo de instrumentos lo hicieron pensando en niños que tuvieran problemas mentales, no se que tan cierto sea eso pero nunca se me olvidará. Una vez que todos tuviésemos nuestro nuevo instrumento en nuestras manos (o en nuestras bocas) nos explicó que ella proyectaría un color y que nosotros teníamos que representa
r lo que sentíamos tocando el instrumento, luego de eso se nos puso un sentimiento y teníamos que tocar.

Para culminar la clase nos separaron según el tipo de instrumento que teníamos, los instrumentos de viento, los de cuerda, las percusiones, etc. Y en menos de media hora hacer una composición, tarea difícil para mi grupo porque con puros instrumentos de viento difícil hacer algo que salga coordinado y armónico y menos todavía si no teníamos alguna percusión que nos diera los tiempos. Al final todos los grupos expusimos lo que resultó ser algo muy divertido y grato. 

Y así fue la clase de “sonido creativo” en Estrategias de Intervención. Se despide Pablo Miranda Sandoval. Cambio y Fuera.

1 comentario:

  1. Bien Pablo, tu blog va bien encaminado.
    Cuida de mantenerlo al día y de incorporar los gadget laterales con enlaces relacionados con la malla curricular. Bien los hipertextos.
    felicitaciones

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